Señores y señoras hemos sobrevivido a la temporada de transición! Así es como se la viene denominando ya hace algunos meses en círculos profesionales. Y en cierta manera por lo que sabemos de la temporada que viene así ha sido. Las temporadas de teatros como el Lliure y el Romea ya ha sido presentadas y se me hace la boca agua sólo de pensar lo que no espera a partir de septiembre. Pero de momento echemos la vista atrás...

Seguimos con el IVA al 21% lo que es un lastre para todos, pero unos esta temporada lo han sabido gestionar mejor que otros. La foto que encabeza la crónica ya lo anuncia, esta ha sido la temporada del Lliure de Lluís Pasqual, la temporada que ha vendido más entradas que ningún otro teatro. La verdad es que la programación se lo ha merecido con éxitos como Els Dies Feliços, Un trozo invisible de este mundo, Vània, Jo Mai o la reposición de Els Ferèstecs

Otra sala a la que acudir obra tras obra ha sido la Sala Atrium que tras muy pocas temporadas a sus espaldas se han hecho un hueco indiscutible en el panorama teatral barcelonés. En esta temporada Lo único que necesita una actriz..., Carme, Lili, Amanda o su gran éxito Himmelweg han demostrado que no hay que perderse su programación.

La Seca por su parte es una de las salas más multidisciplinares de la temporada, en la que poesía, danza, teatro, audiovisuales se dan cita temporada tras temporadas. A ella es mejor ir con los ojos cerrados como fue el caso de El club de Fernando Pessoa, del que salí fascinada y que al ser teatro experimental sólo unos pocos se atrevieron a probar. Lástima!

Pero la temporada más esperada era la de Teatre Nacional de Catalunya donde se estrenaba Xavier Albertí como director artístico. El modelo de programación, con obras, recuperación histórica, coloquios, conferencias... es todo un descubrimiento y una maravilla de aprovechamiento de recursos. Pero la temporada en sí, contando las obras no me ha acabado de convencer. Ni Fum, ni Doña Rosita la Soltera,  ni la gran homenaje a Flotats y El Joc de l'amor i de l'atzar han acabado de poner ese poso que faltaba. Se espera la próxima temporada con ansia, a ver si el modelo que ha mantenido los mismos espectadores que la peor temporada del TNC, la anterior, convence al público en un segundo asalto.

Las decepciones han sido numerosas como en otras temporadas, sobre todo cuando vas a cerca de 150 montajes. Los más sonados: la temporada de la FlyHard (antes y después del abandono de su capitán, Jordi Casanovas) y la adaptación de El setè cel de Caryl Churchill en la Beckett por Teatro de l'Enjòlit, de la que no fui capaz de escribir la crítica en su día porque era incapaz de ver algo de la obra original en el montaje. Catastrófico. 

Pero también ha habido grandes sorpresas que han cosechado alabanzas y aplausos como la apertura de una nueva sala, La Vilella, donde el riesgo y la apuesta por las nuevas dramaturgias está presente y se agradece. Que alguien se acuerde de que en Madrid también hay teatro y nos regale un lunes por la noche, El Intérprete, un disfrute que volverá la próxima temporada. Y obras como: De quan somiava, Nedant cap el mar de la Xina, La Flor de paper, La Realidad, Ojos Verdes, Los hijos de las nubes, Translations, Consejos, Pulmons, o del maravilloso universo de El loco y la camisa.

Pero si me tengo que quedar con una me quedo con Llibert. Este ha sido su temporada. Primero porque la obra es maravillosa, dramaturgia, interpretación, dirección. Entra como una bala directa al corazón y allá sigue inmune a las palpitaciones. Y también por toda la polémica de que ha despertado, porque ha servido al menos por unos días para que algunos dejen de pensar que todo es de color de rosa y que hay problemas que es urgente empezar a solucionar.

Con la llegada del verano también llegó lo que es toda una maratón teatral para lo que nos gusta el teatro, y sobre todo ver qué se hace fuera de nuestras fronteras, el Festival Grec. Esté año chapeau para la dirección artística y para los organizadores. Siempre se le consideró un festival menor, muy lejos de lo que puede ser un Temporada Alta, pero el riesgo de este año ha tenido su recompensa. Plateas llenas, gente aplaudiendo de pie, y éxitos que quedarán en nuestras retinas como: Ubu Roi, Vader, Beyond, Vells Temps y otros que podeís recuperar en breve como Victòria d'Enric V.

De todo, para todos, y con plateas llenas como hace tiempo que no se veía. Con IVAS sin IVAS, pero el teatro ha nacido para quedarse, llueva o salga el sol. Una experiència única que no se asemeja a ninguna otra. En breve volveré a ocupar las butacas de los teatros de aquí y de allá, ¿me acompañas?

CREACIÓN: YARON LIFSCHITZ con el equipo de CIRCA
DIRECCIÓN: YARON LIFSCHITZ
INTÉRPRETES: ROWAN HEYDON-WHITE, BRIDIE HOOPER, RUDI MINEUR, KATHRYN O'KEEFFE, PAUL O'KEEFFE, SKIP WALKER-MILNE y BILLIE WILSON-COFFEY
DURACIÓN: 70min
PRODUCCIÓN: CIRCA
MERCAT DE LES FLORS-SALA OVIDI MONTLLOR (GREC 2014)

Escasa oferta de circo en esta edición 2014 del Festival Grec y la Sala Ovidi Montllor llena para recibir a Circa, que ya el año pasado triunfaron con Opus. En esta ocasión se presentan mucho más salvajes, feroces y animales pero con una fuerte carga sentimental que se refleja desde el principio en la banda sonora escogida para acompañar sus acrobacias.

New York, New York o My Way nos trasladan a un cierto ambiente de cabaret, sus indumentarias marineras y el doble telón lo confirman. El espectáculo se inicia a telón corrido y con una primera acción más dancística que acrobática pero lo mejor está por llegar.  Demostración de fuerza y técnica que deja con la boca abierta a los presentes que aplauden con entusiasmo cada nuevo número. Desde tierra, sobre cuerda, sobre tela, desde el trampolín o la barra sus movimientos son precisos y espectaculares.

Pero no toda la espectacularidad queda encima del escenario, Circa también baja a platea para sorprender al público entre acrobacia y acrobacia. No hay tiempo para el aburrimiento, aquí hasta los "cambios de escena" son increíbles. Beyond también está lleno de comicidad y como sin apenas pronunciar una palabra son capaces de provocar la carcajada general.

Al acabar agradecidos, toda la platea de pie desde el primer bis, hasta el último dándoles las gracias eternas por llenar nuestra vida de fantasía y humor con uno de los imprescindibles del Grec. Un festival que debería haber dejado más espacio al mundo del circo, hay público con ganas de disfrutar y aplaudir a compañías como Circa, que dejan el listón muy alto. Bravo!

BEYOND

by on 16:30
CREACIÓN: YARON LIFSCHITZ con el equipo de CIRCA DIRECCIÓN: YARON LIFSCHITZ INTÉRPRETES: ROWAN HEYDON-WHITE, BRIDIE HOOPER, RUDI MIN...

Font: Laura Serra (ara.cat)
El Teatre Nacional tanca la primera temporada amb Xavier Albertí com a director i arriba l’hora de fer balanç. Les xifres diuen que ha atret 113.143 espectadors per veure teatre a les tres sales i ha tingut de mitjana un 69% d’ocupació, per sobre de la temporada anterior però poc, tenint en compte que aquella va ser la pitjor del TNC. Albertí es mostra satisfet del curs, en xifres i en qualitat.
El TNC ha ofert més activitat i ha rebut més públic, però no ha recuperat els espectadors d’abans de la gran crisi del 2012-2013.
Hem recuperat ocupació, i res ho feia preveure. I si sumes el públic de les conferències, les activitats i la gira, arribem a 160.000 espectadors. No es poden aconseguir més espectadors amb els mateixos recursos. Però treballem per augmentar el públic perquè necessitem la venda d’entrades, perquè no creixerà la subvenció. Però la pèrdua d’espectadors és un fenomen europeu. Es necessiten canvis de paradigma i de formes de relacionar-se entre el ciutadà i la cultura.
I això a qui li toca?
Nosaltres intentem fer-ho amb la diversificació de l’oferta de programació, abraçant totes les disciplines. Però encara tenim un espectador que ve en funció del boca-orella. Com diu Perejaume: “Què hem de fer per destruir la mandra catalana?” Aquest concepte de la mandra no és fruit de la crisi sinó d’un moment històric de decepcions profundes en què el ciutadà busca estímuls en altres llocs. Podem perdre una cosa essencial: la idea que la cultura és una eina clau d’identificació col·lectiva i transformació social.
Aquesta setmana l’actor Pep Cruz feia una pregunta crítica: “¿Cal una inversió milionària per fer un Marivaux al TNC?”
Em sembla, primer, una afirmació desinformada perquè no és una inversió milionària, sinó com la resta d’obres de la Sala Gran. I, segon, cal plantejar si és necessari un model de teatre públic que dialogui amb les nostres cultures veïnes amb unes eines homologables. Jo sóc un defensor del teatre públic perquè, si no, el discurs cultural es veuria segrestat per la tirania dels resultats econòmics. Esclar que això contrasta amb gent jove que s’hi deixa l’ànima, i ho aplaudim. Però aquesta casa ha de fer de canonitzadora i ha de jerarquitzar. Jo no sóc Superman ni estic tocat per la mà de Déu però crec que se’m va triar per un model que implicava elements de reconstrucció de la consciència de la nostra cultura i d’activació contemporània des de la seva jerarquització. I sé que fa mandra i por, però a mi no me’n fa. No tothom és igual. Hi ha gent que té una carrera i uns mèrits.
¿L’ Epicentre Pitarra i l’obertura de la Sala Tallers són els èxits de l’any?
L’operació Pitarra era una de les meves dèries, i no per recuperar un autor sinó perquè hem normalitzat una cosa que no ho era: la possibilitat de rellegir el nostre patrimoni amb claus ideològiques diverses. Hi ha un terreny molt gran, verge i ple de tresors. I això interacciona amb una Sala Tallers que ha passat d’estar tancada a tenir un 80-90% d’ocupació. La crisi ens ha ensenyat que hi ha alguns aspectes dels quals hauríem d’aprendre: necessitem tenir una cuina d’idees i hi ha públic per a això. La idea simple amb la qual vaig arribar era la de trencar amb l’equació de TNC = sala d’exhibició i convertir-ho en un organisme complex que reflexiona, educa, provoca laboratori i intercanvi, i això és possible. Per tant, bravo!
Ha produït molt: 22 obres de 23.
Hem contractat 171 actors i 147 professionals artístics. Si treus això, l’estructura teatral d’aquest país s’ensorra, i no em vull comparar amb cap altre teatre públic. Si per quadrar pressupostos fem política d’invitació a taquilla, a part que és competència deslleial als teatre privats, no invertim en els nostres creadors. No podem renunciar a la funció de centre de producció.
La creu: Flotats i Marivaux al 52% i Fronteres al 31% d’ocupació.
És evident que tinc les meves feridetes. Als espectacles que no són evidents, com Fronteres, costa que hi hagi curiositat per veure-hi experiències profundes. L’objectiu ha de ser tenir espectadors còmplices. Al teatre sempre tens l’ai al cor. El TNC funciona si tens tres èxits a la Sala Gran de llarg recorregut. Això és conviure amb la pistola al cap. Quan els pressupostos tinguin més salubritat, espero que no ens l’hàgim de jugar tant a encertar-les. He gastat fins a l’últim cèntim. Amb els diners que teníem, el que hem fet és un miracle.

Fuente: Carmen del Val (elpais.com)
El Ballet Contemporani de Barcelona reestrena hoy la Frida de Amèlia Boluda en el Mercat de les Flors de Barcelona, exactamente 21 años después de su creación. No es un capricho: el Grec apuesta, desde la pasada edición, por la recuperación de la memoria coreográfica catalana; así, en 2013 la protagonista de este proyecto de rescate fue Àngels Margarit y en la presente edición le ha tocado el turno al significativo trabajo de Boluda que realizó sobre la artista mexicana Frida Kahlo y que el Ballet Contemporani de Barcelona, pionero en la danza contemporánea en Cataluña, estrenó en 1993 en Costa Rica.
La fascinación que Boluda siente por Frida Kahlo se remonta a 1979, cuando viajó por primera vez a México y visitó la casa de la pintora, en el barrio de Coyoacán de la capital azteca. “En mi espectáculo no quise ni quiero hoy dar una visión de Frida como pintora, sino que me interesa su carácter como ser humano. Para mí, la artista es una mujer poliédrica con muchas caras: la de adolescente, la de adulta, la de enamorada, la de activista política y la de enferma”, dice la coreógrafa. “Me apasiona su fortaleza física y psíquica, su ideología y su libertad sexual; ese espíritu de supervivencia es lo que plasma mi trabajo”.
Confiesa la coreógrafa que “la Frida de 2014 no es diferente de la de 1993, pero sí que en esta ocasión cuento con 14 intérpretes, nueve bailarines y cinco músicos, una cifra superior a la del estreno, lo que da otra dimensión al espectáculo”.
En la versión de 1993, Boluda era Frida; “ahora aparezco al principio del espectáculo, como evocación de mi propio recuerdo, pero luego el escenario se llena de Fridas y de Diegos de Rivera, multiplico los pasos a dos y los solos y el trabajo coral tiene mayor fuerza”. Y apunta: “José Mechero ha creado una escenografía con una gran cama, que tiene un doble sentido: el lecho del dolor que cobijó la enfermedad de Frida, pero también el lecho de los grandes amores y de los placeres de las fugaces aventuras amorosas”.
Con relación al vocabulario coreográfico, la autora ha realizado algunos cambios. “Me he adaptado a los intérpretes que tengo ahora: hay una bailarina que expresa a través de la lengua de los signos fragmentos del diario de Frida y también he querido que participaran algunos intérpretes que estrenaron la pieza, como Bebeto Cidra”, añade. “De alguna manera, en el espectáculo hay un relevo generacional que enriquece el montaje”.
El Ballet Contemporani de Barcelona ha contado para esta Frida con Carlota Subirós en la dramaturgia, con los intérpretes del Taller de Músics para ejecutar la partitura original de Xavier Maristany y con la cantante Rosalía Vila, que interpreta un apasionado bolero. Durante la representación también se proyectarán unas imágenes inéditas sobre Frida Kahlo, cedidas por la Universidad de México.

Font: Belén Ginart (ara.cat)
L’any 2006 vas arribar a Barcelona per operar-te de les greus ferides causades per una bomba, i des d’aleshores vius aquí. Havies fet teatre abans?
Pràcticament gens, només alguna cosa de teatre social. He treballat de moltes coses, quan m’ho pregunten sempre dic que acabarem abans si dic de quines coses no he treballat. Però no sóc actriu.
Com et vas animar a actuar a Nadia?
Vaig conèixer el director, Carles Fernández Giua, arran d’una altra obra en la qual jo feia de traductora. Ens vam fer amics i em va proposar de fer una obra amb la meva història. Al principi li vaig dir que no perquè no havia treballat mai davant del públic, però després m’ho vaig rumiar. La companyia es plantejava proposar-ho a algú altre, però l’obra parla de mi i jo estic viva, de manera que vaig decidir interpretar-la jo.
També has participat en la dramatúrgia de l’obra.
Sí. Per mi és difícil parlar sobre el meu passat, perquè va ser molt dur. Així que vam arribar a l’acord de parlar només de les coses que em vinguessin de gust.
Què n’has deixat fora?
Les coses més doloroses. M’agradaria que la gent pogués entendre la meva vida i la situació del meu país sense posar-se trista. M’agradaria que l’obra donés una esperança, que mostrés que hi ha gent bona que permet tirar endavant a persones com jo.
I què hi queda?
Faig com un resum des que era petita fins que arribo a Catalunya. Recordo molt la meva mare, un pagès amb qui teníem molt contacte, els meus amics, gent que estava molt amb mi.
Parleu de la guerra?
La guerra també hi apareix, com un dels meus malsons. Descric com deixa marcada la gent. Però no hi posem gaire èmfasi, el més important per a mi és donar esperança.
Com tracteu el paper de la dona?
Parlem del contrast entre la vida de la dona aquí i a l’Afganistan. Per mi són dos mons molt diferents. Quan torno al meu país vaig tapada amb el nicab. Ho faig per una qüestió de seguretat, perquè durant molts anys vaig viure com si fos un home i tinc por que li pugui passar alguna cosa a la meva família si es descobreix que aquell home era en realitat una dona. Però ho passo malament, perquè a mi m’agrada ser una dona lliure, i quan hi torno i no puc fer res del que sóc per a mi és molt dur.
Quin format té l’espectacle?
No és ben bé un monòleg, la major part del temps parlo jo, però ho faig en tercera persona i tant el director com l’escenògraf són al meu costat. El Carles i l’Eugenio m’ajuden donant peu a personatges de la meva vida.
Hi ha projeccions audiovisuals?
Sí. L’escenografia és una pantalla corba, l’obra és un documental escènic i fem un joc entre les imatges i la persona.
Quines imatges utilitzeu?
Vam anar a l’Afganistan a enregistrar imatges que ens ajudessin a explicar la meva vida allà. A les imatges no hi surten la meva mare ni la meva germana biològiques, sinó els amics afganesos. I també els meus pares catalans, que són els àngels de la meva vida.
També hi ha música?
Sí, d’un cantant afganès, Ahmad Zaihr, que va morir prematurament i que m’agrada molt. La música és una part molt important de la meva vida, com també ho són les pel·lícules i els contes tradicionals afganesos que m’explicava la meva mare quan jo era a l’hospital. M’ajuden a esborrar la tristesa.
A l’obra hi ha moments durs?
Depèn de la mirada de l’espectador. Amb el llibre autobiogràfic El secret del meu turbant [coescrit amb la periodista Agnès Rotger] va passar igual. Al 80% els va semblar una història optimista, però un 20% la van trobar molt dura.
Quina vida tindrà més enllà del Grec?
La vam fer a Madrid fa uns dies i al setembre la portarem en gira per Catalunya. Fins ara he vist que la meva història arriba a la gent, moltes persones agraeixen que la comparteixi amb ells.
Vas sovint a l’Afganistan?
Més o menys un cop a l’any. Segueixo en contacte gairebé diari amb la meva família d’allà.
T’agradaria tornar-hi a viure?
És una de les meves il·lusions. M’agradaria formar-me bé aquí i poder tornar per ajudar-los a fer els canvis que necessiten. 
‘Nadia’ (Grec 2014). CCCB (Montalegre, 5, BCN). Del 24 al 27/7. Amb Nadia Ghulam, Carles Fernández Giua, Eugenio Szwarcer. Dir.: Carles Fernández Giua. Disseny d’espai i vídeo: Eugenio Szwarcer

DRAMATURGIA y DIRECCIÓN: JOSEP MARIA MIRÓ
INTÉRPRETES: ARNAU PUIG, DAVID MARCÉ y RICARD DARRÉ
DURACIÓN: 70min
PRODUCCIÓN: LA PADRINA
LA SECA

A medio camino entre el thriller y el teatro social, Josep Maria Miró se aventura a hablarnos de los recortes en cultura, pero sólo es una excusa para explicarnos las relaciones laborales y personales de los tres protagonistas. Thriller o no, la tensión se mantiene durante todo el espectáculo, a veces por la revelación de alguna información que parece ser importante para el desarrollo de la historia, otras por la mera repetición de datos y estructuras dramatúrgicas.

La puesta en escena del texto utiliza técnicas cinematográficas como los flashbacks i los flashfowards, pero simplemente con el movimiento intencionado de los actores. Una trama sencilla de seguir con sus saltos hacia delante y hacia detrás ayuda a que el público no se pierda. Una vez fijados los personajes en su drama particular simplemente nos hace falta descubrir qué secreto guarda cada uno. Después de alguna vuelta de más, algunos se acabarán revelando.

A penas 70 minutos y todo queda atrás, una dramaturgia que se encalla en determinados momentos y que es salvada por la interpretación valiente y templada de Arnau Puig, David Marcé y Ricard Farré. Quizás falte un poco más d profundidad en los problemas sociales y la falta de recursos del centro, eso hubiera dado al texto algo más de movimiento y contenido en algunos momentos donde parece que lo que muestra ya lo has vivido antes.

De todas maneras, la primera producción de La Padrina apunta maneras de lo que deseamos que sea un largo futuro. Teatro comprometido con la sociedad actual, bien interpretado y dirigido. Esperaremos el segundo montaje de esta nueva compañía.

ESTRIPAR LA TERRA

by on 17:59
DRAMATURGIA y DIRECCIÓN: JOSEP MARIA MIRÓ INTÉRPRETES: ARNAU PUIG, DAVID MARCÉ y RICARD DARRÉ DURACIÓN: 70min PRODUCCIÓN: LA PADRI...

Fuente: David Moran (abc.es)
En la platea no hay ni un alma, pero el escenario y la caja escénica del Gran Teatro del Liceo es un ir y venir constante de cajas con ruedines, telones, operarios con cables y pesadas piezas de escenografía. En un rincón, justo frente a la boca del escenario, unos cuantos fusilesdescansan a la espera de que alguien se anime a empuñarlos. Un poco más allá, detrás de la inmensa caja negra que sustituye al escenario rotatorio de anteriores montajes, se amontonan carromatos, tramos de escaleras, barriles de explosivos con amenazantes calaveras garabateadas en blanco y, en fin, todas y cada una de las 90 toneladas de material que «Los Miserables» moviliza cada vez que sale de gira y aterriza en una nueva ciudad con sus once trailers y su aún más voluminosa historia de récords y aplausos a cuestas.
No en vano se trata de uno de los grandes musicales que ha dado el género, una pieza que han visto más de sesenta y cinco millones de personas de cuarenta y dos países desde su estreno en Londres en 1985 y que mañana desembarca a lo grande en Barcelona con casi todas las localidades vendidas para seguir haciendo lo que mejor sabe hacer. Esto es: historia. Sobre el escenario, el clásico de Víctor Hugo y la trágica epopeya de Jean Valjean, un exconvicto encerrado durante veinte años por robar un pedazo de pan, volverán a sumergir a los espectadores en este fresco musicado de la Francia de la primera mitad del siglo XIX. Una historia inmortal y universal repleta de venganza, redención, traición y amor cuya puesta en escena requiere decuatro días de montaje así como de un centenar de operarios que se turnan para cubrir jornadas que se alargan durante 24 horas.
Unos números que, sumados los 34 actores-cantantes que desfilan sobre el escenario y a los catorce músicos que dirige desde el foso el malagueño Arturo Díez, hacen de la versión española de «Los miserables» la producción de mayor envergadura que ha girado por la península, como señala el responsable técnico del montaje, Francisco Grande. Y no solo eso: con su estreno en el Liceo, la obra se convertirá en el primer musical en hacerse un hueco entre las magnas paredes del coso operístico barcelonés. «Que ahora “Los Miserables” llegue al Liceo, un espacio propio de la música culta, es como un reconocimiento que tiene este musical, del nivel de su música, de su producción y de la historia que explica; en suma, de la capacidad de emocionar que tiene», señalaba el director de la versión española,Daniel Anglés, en una entrevista reciente.

Espacio ideal

Normal que los responsables del montaje consideren el Liceo como un espacio inmejorable —no hay más que ver la gigantesca caja escénica, con espacio suficiente como para que los trailers descarguen directamente todo el material a pie de escenario— para un espectáculo que, entre bambalinas, combina los elementos de telar por contrapesada y de suelo con cambios automatizados. «“Los miserables” es una producción que donde mejor luce es un teatro a la italiana. Gana vistosidad y proximidad», reconoce Grande, responsable de que todo esté perfectamente engrasado y no haya ningún contratiempo durante los sesenta cambios de escena que se suceden durante las dos horas y media que dura la obra. Un auténtico maratón escénico tras el que se esconde el trabajo de una treintena de técnicos que no pierden detalle de lo que ocurre sobre el escenario.«Nuestra misión es facilitar el trabajo de los actores», reconoce Grande, quien, pese a no estar del todo seguro, cree que ya ha escuchado la obra completa en cerca de 200 ocasiones.
La precisión, asegura, es clave. También uno de los rasgos distintivos de una obra que, como le gusta subrayar al productor inglés de la obra, Cameron Mackintosh, se ha convertido en uno de los hitos del teatro musical porque el montaje es exactamente el mismo allá donde se represente. Da igual que sea en Londres, Nueva York, Toronto o, como es el caso, Barcelona. Los decorados, las coreografías y, cómo no, los números musicales, tienen que ser idénticos. Podrá cambiar el espacio y la manera de trabajar —hay pocos recintos, reconoce Grande, en los que uno pueda disponer de 15 toneladas de paneles y decorados sujetos al telar—, pero la ejecución siempre es la misma.
En este caso, la versión de «Los Miserables» que llega a Barcelona —después de bajar el telón el 3 de agosto, seguirá girando por Bilbao, Salamanca, Logroño y Valencia— es la que se ideó con motivo del XXV aniversario de la obra y que incorporó, como parte del decorado, la proyección de dibujos creados por el propio Víctor Hugo y que, a fuerza de combinarlas con la iluminación, crean imágenes cercanas al 3D.
Una novedad que sobre el escenario compartirá protagonismo con Felipe Forastieri (Jean Valjean), Ignasi Vidal (Javert), Elena Medina (Fantine), Carlos Díaz (Enjol Ras), caras visibles de un reparto ligeramente diferente al que pudo verse cuando el montaje pasó por el Barcelona Teatre Musical en 2013 pero que siguen apuntalando un musical de récord que actualmente se representa de manera simultánea en Londres, Broadway, Melbourne, Corea, Japón y, claro, España, donde el Liceo es la gran conquista.

Fuente: Cristina Marinero (elmundo.es)
"Si Lope de Vega escribió 'El maestro de danzar' es porque esa figura era imprescindible en el siglo XVII para toda gran familia que se preciara. En el Barroco se entiende el danzar como un hecho, no sólo popular, sino también elevado". La directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, Natalia Menéndez, ha querido que este arte estuviera muy presente en esta edición y ha impulsado el Taller de danza del Siglo de Oro que imparte la experta en danza de época, Mª José Ruiz Mayordomo.
Actores, bailarines, músicos y cantantes líricos son los alumnos de esta experiencia pionera por la que ha apostado la responsable del prestigioso festival, en la que "se está trabajando sobre las fuentes originales, principalmente manuscritas, para traer la danza del Siglo de Oro al siglo XXI", cuenta Ruiz Mayordomo. "Me gusta observar al público durante las funciones", confiesa por su parte Menéndez, "y en el momento en que aparece la danza, las caras de los espectadores siempre se iluminan".
El arte del movimiento, que con tanto virtuosismo dominaban Lope y sus coetáneos, además, "está presente en dieciocho de las obras programadas este año", cuenta Natalia Menéndez, "tanto en su apertura, con 'Un viaje a través de la historia de la tarantela', o los diversos montajes de la sección oficial, como en 'Barroco para niños' o 'Almagroff'". También el Premio Lorenzo Luzuriaga, que ha galardonado en otras ediciones a Concha Velasco, Antonio Gala o José María Pou, ha recaído en la danza y ha sido el director de la Compañía Nacional, José Carlos Martínez, quien lo ha recibido.
Mª José Ruiz Mayordomo explica que en este taller "se está trabajando la danza alta que Lope de Vega incrustó en El maestro de danzar y, también, sobre una fusión de danza y baile para seis damas de la Loa para empezar, atribuida a Calderón de la Barca, cuyo manuscrito original se encuentra en la Biblioteca Nacional de España".
La investigadora recuerda que "se denomina danza a la coreografía ordenada con normas estrictas, donde predomina el trabajo de pies, mientras que en el baile prima la coreografía más libre donde los brazos, el torso y, en algunos casos, las castañuelas, toman el protagonismo". Estos bailes del XVII que encontramos en Lope o Calderón "son los antecedentes directos de los bailes boleros del siglo XVIII y, por tanto, de la danza española actual".
"España exportó danza por tierra y mar desde el siglo XVI", recuerda Ruiz Mayordomo, "por eso hay jotas en Filipinas o canarios (baile de percusión de pies) en Méjico. Se bailó con castañuelas, incluso, en la corte de Viena desde principios del siglo XVII". "La danza era tan fundamental en esta época", concluye Natalia Menéndez, "que hasta en los barcos rumbo al nuevo mundo siempre fue un maestro de danzar".
Fuente: María Quintana (elmundo.es)
Mientas que el caluroso asfalto de la gran urbe ahoga a residentes y turistas de la capital, en pleno centro un oasis resiste. Los jardines de Sabatini, ante la imponente presencia del Palacio Real, parecen respirar un aire diferente donde los versos de 'La venganza de Don Mendo' que se recitan una y otra vez preparándose para la gran cita del estreno, se entrelazan con el murmullo de una ciudad que todavía no duerme. 96 años después de que el texto de Pedro Muñoz Seca, el cuarto más representado de la historia del teatro español, se subiese a las tablas por primera vez en el Teatro de la Comedia de Madrid, Jesús Castejón se pone a las órdenes de la farsa constante que es 'La venganza de Don Mendo'.
Castejón, director y también intérprete perteneciente a una saga de actores líricos, todavía recuerda como, con seis años, su prima le llevó a una sala de cine de Alicante para ver la versión en cine del texto de Muñoz Seca que Fernando Fernán Gómez había escrito, dirigido y protagonizado en 1961. "Me llamó muchísimo la atención la forma en la que se hizo la película, tan teatralmente, que se veía constantemente el truco a propósito. Creo que si esto se permite es porque los personajes tienen una complicidad con el públicodurante toda la función, rompen constantemente la cuarta paredhaciéndoles partícipes de lo que ocurre, de la broma constante", expone Castejón.
Fernando Fernán Gómez, Raúl Sénder, Manuel Gómez Bur, Javier Veiga... No son pocos los prestigiosos cómicos que en cine o teatro se han enfundado ya el traje de Don Mendo, por eso Ángel Ruiz, el protagonista de la obra que se representa en los Jardines de Sabatini, no puede evitar plantearse este personaje como un reto. "Todo el mundo tiene en la retina como mínimo una versión de la obra", comenta el actor que anteriormente era el canalla y gamberro guía en 'The Hole'. Nada tiene que ver el personaje que interpreta en la obra de Muñoz Seca, un noble pobre traicionado por Magdalena, que prefiere a Don Pero, un rico privado del Rey, con el que podrá ascender socialmente.
"A mí me ha salvado el ser multidisciplinar y versátil que no es el caso de todo el mundo", comenta el actor protagonista, "me ha servido para salvarme de la quema. Tengo muchos compañeros que están en paro y sin posibilidad de trabajo así que es una buena opción para seguir en pie, en mi caso no solo por una cuestión de trabajo sino porque me gusta tocar todos los palos".
Tras unos tablones que forman una escenografía en continuo movimiento se asoma, tímida, la imponente arquitectura barroca del Palacio Real. Durante los primeros versos quizás la estructura se muestre como un personaje más que, sin guión, trate de arrebatar miradas y concentración. Una vez avanzada la obra, la magia del teatro hace su efecto y los 29 actores en escena se alzan con el protagonismo absoluto de la parodia burlesca. Aún así, el escenario crea inevitablemente un ambiente imposible de igualar en cualquier otra sala de la capital.
"Se puede pensar que en un espacio como Sabatini la dificultad está en el teatro de palabra y confieso que hasta que hicimos el ensayo técnico tenía esa inquietud. Quizás la única pega puede ser la distancia entre actor y espectador pero es una obra grande, son muchos en el escenario por lo que hay suficiente movimiento, al final se convierte en un espectáculo grande", explica Castejón.
Casi 100 años después de la primera representación de 'La venganza de Don Mendo', las dos horas de verso, que según explica el director de la función pudieron haber sido escritas por Muñoz Seca en tan solo una noche, continúan arrancando la carcajada general. "En la obra el conflicto es lo de menos, es la forma de representarla y la idiosincracia de los personajes, cómo hablan, esto es lo que la hace atractiva y divertida. En épocas de necesidad de felicidad, de evadirse, es un texto muy indicado".

Font: ara.cat
El Teatre Nacional de Catalunya ha fet públic avui el balanç quantitatiu i qualitatiu de la temporada, la primera que ha dirigit Xavier Albertí després de rellevar Sergi Belbel.
En el capítol de xifres, el TNC ha obtingut 113.143 espectadors, 3.000 més que la temporada anterior, que d'altra banda va ser un mínim històric del teatre.
L' ocupació ha pujat del 60% al 69% i el nombre d'espectacles i activitats també ho ha fet. S'han fet 23 muntatges, 22 dels quals el teatre tenia règim de productor. Els espectacles en gira, les 6 obres que han fet temporada en altres teatres, han donat un gran resultat: 45.555 espectadors i un 82% d'ocupació. La més exitosa, la reposició de 'Barcelona'. 
323 professionals de les arts escèniques que han format part dels equips artístics dels muntatges del teatre.
En l'apartat qualitatiu, per Xavier Albertí l'essencial és que el TNC es posiciona com a centre per a la reflexió cívica i de trobada amb l'espectador.
- En destaca l'èxit de l' Epicentre Pitarra, "una de les operacions de recuperació patrimonial més importants que ha fet mai el teatre català, no només per haver arribat a mitjanes d'ocupació superiors al 90% en la majoria de muntatges teatrals, sinó pel gruix del discurs que ha generat i la repercussió mediàtica obtinguda".
- I també un programa d'activitats que té el mateix pes que les obres en cartell: 22 activitatsparal·leles entorn dels muntatges (conferències, col·loquis, exposicions, cicles de pel·lícules),edició de 33 títols teatrals (més de la meitat del total de textos teatrals en català publicats aquesta temporada), creació de 13 Clubs de Lectura gràcies a la implicació de les Biblioteques de la Generalitat de Catalunya, establiment de sinergies amb altres centres nacionals i internacionals i circulació de traduccions de textos teatrals.
- I finalment, l'eix temàtic de 'Frontera', que ha obtingut, però, poc èxit de públic: 'Moro com a país' té un 39% d'ocupació i 'Fronteres' un 31% d'ocupació
ESPECTACLES AMB MÉS PÚBLIC
- 'La rosa tatuada': 25.557 espectadors i 82% d'ocupació. Sala Gran.
- 'Doña Rosita la Soltera o el lenguaje de las flores': 21.998 espectadors i 76% d'ocupació. Sala Gran.
- 'El joc de l'amor i de l'atzar': 17.297 espectadors i 52% d'ocupació. Sala Gran.
- 'Terra de ningú': 10.654 espectadors i 95% d'ocupació. Sala Petita.
ESPECTACLE AMB MÉS OCUPACIÓ
- 'L'esquella de la torratxa': 99% d'ocupació i 829 espectadors. 3 funcions. Sala Tallers.
- 'Un mosquit petit': 96% d'ocupació i 934 espectadors. Sala Tallers. 5 funcions. Sala Tallers.
- Un punt darrere de 'Terra de ningú', 'Taxi... al TNC!': 94% d'ocupació i 4.757 espectadors. 6 funcions. Sala Gran.
Albertí destaca la Sala Tallers com "el cor del teatre per ser el centre de recuperació del patrimoni teatral, l'espai prioritari del projecte pedagògic i el lloc de creació de nou públic amb espectacles, propostes escèniques i conferències de procedències ben diverses".

Fuente: abc.es

Érase una vez un dramaturgo de finales del siglo XVI que dio el salto alcine a finales del siglo XX. Por el camino cosechó un premio Oscar a la mejor película en 1998 y su historia, dirigida por John Madden, guionizada por Tom Stoppard e interpretada por Joseph Fiennes y Gwyneth Paltrow fue un rotundo éxito.

Se trataba de «Shakespeare in Love», un argumento por el que el célebre dramaturgo va a dar ahora el salto al teatro, cerrando así el círculo de las artes escénicas. Hoy, el Noel Coward de Londres asisitirá al estreno de este título adaptado al teatro, con unas expectativas de éxito bastante elevadas. Se trata de un proyecto bastante arriesgado teniendo en cuenta el éxito de crítica y público que tuvo la película. Por esto, los productores han sido muy prudentes y aseguran que el 90 por ciento de la función se corresponde con el guión de la película. Los responsables de la obra harán notar su mano con una puesta en escena imaginativa, donde los 28 actores que tienen a su cargo tratarán de cumplir con lo que se espera de esta producción.
El director de la obra, Lee Hall, cree que «siempre es más difícil adaptar algo que es bueno, porque de algo malo siempre se puede hacer algo mejor», informa he New Tork Times». «Yo era muy consciente de que el trabajo de Tom [Stoppard] y [Marc Norman] era algo que a mucha gente le encantó. Yo quería ofrecer algo que era más que la película, de lo contrario no tendría sentido».
En principio, la función estará en cartel hasta el 25 de octubre y tendrá entradas para todo tipo de bolsillos. De las casi 900 butacas con las que cuenta el recinto, las hay por 19 euroshasta un máximo de 110. La producción está dirigida por Declan Donnellan y diseñado por Nick Ormerod, una comedia romántica que transportará a Shakespeare de vuelta a Londres.

Font: Imma Fernández (elperiodico.cat)
Apassionat conversador i director teatral, el francès Sylvain Creuzevault ha tingut la gosadia de portar El capital de Karl Marx -l'obra més influent, a part de La Bíblia- als escenaris. Però, i heus aquí el ganxo, en clau còmica. D'entrada, explica Creuzevault, cal oblidar-se del concepte d'«avorriment i llauna» que desperta en l'imaginari qualsevol referència al text de Marx. «He volgut desdramatitzar la seva imatge seriosa», aclareix. «A França li hem canviat el títol i ara és El capital i el seu mono de repetició». El capital que es presenta al Teatre Lliure, del 24 al 26 de juliol, és una comèdia, una farsa, que desemmascara, això sí, el gran vampir de la societat actual. La interpreten en francès 13 actors de la companyia D'ores et déjà, que malgrat que solen treballar molt la improvisació, s'han hagut de cenyir al text pels sobretítols en català.
Explica el jove director que el concepte que li va interessar més tractar, més enllà de la lluita de classes, és «el fetitxisme de la mercaderia». «Tot al món és mercaderia, ha esdevingut un déu. Els béns valen més que les persones que els produeixen. Els productors se sotmeten a les seves pròpies produccions». L'obra porta al terreny de la comèdia de l'art, al riure sardònic, els «progressos de l'alienació social obtinguts pel sistema de producció capitalista».
L'acció se situa al París del maig del 1848. Al Club dels Amics del Poble, que va fundar François-Vincent Raspail després de la revolució que va acabar amb la monarquia de Lluís Felip I de França. Els personatges tornen de la primera manifestació organitzada després de la reunió de la nova assemblea constituent, escollida per sufragi universal masculí, que proclama la Segona República. En aquest context el poble vetlla perquè no li confisquin el moviment revolucionari durant el qual la qüestió social del treball s'ha situat en l'esfera política.
Creuzevault ha fugit de la voluntat didàctica i historicista en una obra que connecta directament amb l'hecatombe d'aquest convuls segle XXI. En la seva ficció, convoca pensadors com Freud, Brecht o Foucault en aquest club fraternal que es converteix en un vesper de discussions i baralles. Alguns comencen a desconfiar del sufragi universal, aparentment un fet democràtic, però que a la pràctica condueix a la confiscació del moviment per part de la representació política. Els que decideixen passar a l'acció, acabaran detinguts i portats a judici.
«Vivim dependents d'un munt de coses que no podem controlar. El capitalisme ha portat a l'al·lucinant auge del desig de submissió a l'Estat per part de la societat. Com més consumista i dependent de l'economia, més requereix un Estat fort», es lamenta Creuzevault, que ha preferit portar la qüestió a debat abans de formalitzar alguna solució. «Tot és tan confús que necessito molt més temps d'observació». El que té ben clar és que l'únic que ens uneix en aquest món és el mercantilisme. S'acomiada amb una última reflexió: «En la manera de producció capitalista tots sabem el text que hem de seguir però no hi ha autor. Aquest és el misteri».

Font: Jordi Bordes (elpuntavui.cat)
En tenien ganes. I per això, després de tres anys de tossuderia, presenten espectacle musical al Teatre Gaudí Barcelona amb temporada tancada, fins al 31 d'agost. Són 20 actors i 5 músics que han embrancat tot un equip de professionals, Daniel Anglès al capdavant, en aquesta aventura d'entusiasme. Per sobre de totes les coses és la il·lusió que aquests intèrprets (molts pràcticament debuten) i també l'emoció d'aquest jove personatge que es reconeix homosexual en un internat catòlic i nota com la seva parella és incapaç d'afrontar la seva condició, per por de perdre el futur que ja imaginen els pares: universitat, família, progrés. Aquesta setmana també arrenquen les funcions de Los miserables, que Stage Entertainment presenten al Liceu (del divendres fins al 3 d'agost) i va fent darreres funcions (fins diumenge, si no hi ha pròrroga) d'un dels títols més desinhibits d'aquest Grec: Merda d'artista, al Poliorama. I, en un ambient molt més íntim, el grup Els Pirates signen, fins a l'1 g'agost, Les golfes del Maldà, al Círcol Maldà.
Anglès ho deia des de bon començament. Aquesta obra és inviable perquè hauria de tenir un pressupost de 600.000 euros. I com que el director només la imagina en un espai de proximitat (i, per tant, un aforament no superior als 200 espectadors) resulta pràcticament impossible cobrir despeses. És inviable però es fa pel concepte de “teatre de trinxera”. Anglès s'ha afegit a la iniciativa perquè hi veia l'entusiasme, “però això només és una flamarada si al darrere no hi ha determinació”. El fre del cost no els ha rendit.
Bare (l'original que ha traduït amb prou encert Marc Gómez (Deudeveu i Un cau de mil secrets) és una òpera-pop del 1991. Anglès ha mantingut l'època i ha obviat els telèfons mòbils. Les trucades amb el fix de casa i les notes amagades tenen tot el pes en una obra de secret, de pensaments controvertits entre la creença catòlica i el descobriment de la sexualitat personal. Com a La llamada (després d'un any voltant per Madrid va fer provatura de tres funcions al Barts, al juny) la religió és un punt clau en la trama de la peça. Però es presenten uns personatges ambigus per no judicar res. De fet, a Per sobre de totes les coses, la monja (Lucy Lummys, Los productoresChicago) canta un Déu ho fa tot bé per justificar l'amor entre dos nois mentre el mossèn de l'internat (Eduard Doncos, Germans de sang) prefereix amagar la controvèrsia de la sexualitat, que acabarà resultant fatal. Els papers principals són per a Marc Flynn (Un cau de mil secretsGerónimo Stilton), en el paper de Peter; Jan Forrellat en el paper de Jason (que ha estat la descoberta del càsting i que consta la peça com el seu debut) i Anna Herebia (La flauta màgica-Variacions Dei Furbi) fent d'Ivy. També destaca Ester Bartomeu (ChicagoOff BroadwayMerrily we roll allong), que és la mare de Peter, que també mira d'obviar l'homosexualitat del fill perquè veu que el farà patir. L'obra, tot i poder-se considerar un musical de culte pel col·lectiu homosexual, i que també podria ser la comèdia romàntica de Smiley de Guillem Clua, en realitat és per a molts més públics. Perquè hi ha la mare que pateix; els companys que són fidels, al final de tot; la noia que s'enamora; la que no té mai la resposta que voldria dels pares i de la colla: en definitiva, personatges que es troben en el creuament de camins de l'adolescència.
Ben diferent és Los Miserables. Va ser al BTM on es va fer el debut internacional de la nova posada en escena del musical del productor Cameron Mackintosh, quan feia 25 anys de l'estrena. En la nova versió s'hi s'incorporaven il·lustracions del propi Víctor Hugo com a decorat de fons. Stage Entertainment deebuta al Gran Teatre del Liceu. La gran productora de musicals internacional, torna a Barcelona, tot i que sigui només per uns dies, després de la seva època al BTM, on sí que va aconseguir triomfar amb Mamma mia i La Bella y la bestiaLos miserables és la peça més ben acabada que ja parteix d'un original tràgic i controvertit, que es complementa amb una partitura èpica i romàntica.
I diferents són també els dos últims casos d'uns musicals que ja tanquen la seva estada a Barcelona. Per una banda, hi ha Merda d'artista, al Poliorama, que aguantarà fins al 27 de juliol. Creada pels impulsors dePegados (una parella es queda enganxada fent l'amor i han d'anar a urgències perquè els deslliurin), en aquest nou títol parteixen del fet real de Piero Manzoni, un artista conceptual que es va fer famós venent llaunes amb els seus propis excrements. La peça, hilarant i desbarrada, és intel·ligent quan manté el diàleg entre el músic i els personatges. El Círcol Maldà proposa una obra amb música dels anys 50 presentant un cabaret estival (cançons, coreografies, crítica, humor i striptease) amb la presència de tres actrius, un actor i una pianista. També auguren sorpreses diàries amb l'aparició d'artistes convidats.

Afamats de musicals

by on 17:42
Font: Jordi Bordes ( elpuntavui.cat ) En tenien ganes. I per això, després de tres anys de tossuderia, presenten espectacle musical al...